
FASES DE UN TRATAMIENTO FITOSANITARIO
Sí algo no ha cambiado con el paso de los años, es que si no tomamos las medidas adecuadas, nuestras plantas y árboles pueden verse afectados por multitud de enfermedades y plagas invasoras que incluso puede acabar con su crecimiento o vida.
Por evitar esto, es necesario saber cuáles son las causas de estas plagas y enfermedades y, sobre todo, conocer con precisión cuándo debemos aplicar un tratamiento fitosanitario.
Ahora bien, no te preocupes porque a continuación vamos a explicarte con todo lujo de detalles todos esos aspectos que forman parte de la realización de un tratamiento fitosanitario.
¿Qué es un tratamiento fitosanitario?
En primer lugar, debemos saber que los tratamientos fitosanitarios son aquellos que están encaminados a la erradicación y prevención de las enfermedades que se gestan en las plantas y árboles.
¿Cuáles son las fases de un tratamiento fitosanitario?
La primera fase siempre debe ser realizar un reconocimiento de qué vegetación va a ser objeto de tratamiento, es decir, qué plantas o árboles hay y cuáles son las enfermedades que pueden padecer cada uno.
La segunda fase es actuar de forma preventiva, es decir, reducir los daños lo máximo posible y aplicar medidas y productos que eviten que las enfermedades se propaguen o vuelvan a aparecer.
La tercera fase es identificar la fauna útil y verificar la incidencia que pueden tener.
Una vez que todos estos pasos se han ejecutado y verificado, la cuarta fase está dirigida hacia los árboles y plantas infectadas, donde se determina si se tratarán o no.
Sí se toma la decisión de tratar las plantas, el quinto paso es la elección de los productos fitosanitarios que sean ideales para el control de la enfermedad.
Ten en cuenta que se considera que un producto es ideal en la medida de que su toxicidad sea la menor para la planta, su eficacia y su disponibilidad.
¿Cuáles son los objetivos de los tratamientos fitosanitarios?
El más evidente es eliminar las enfermedades de las plantas y árboles enfermos, pero también es un objetivo de los tratamientos fitosanitarios aumentar la resistencia y condiciones de la planta o árbol ante diversos inconvenientes.
A su vez, se persigue minimizar en el ecosistema los riesgos de enfermedades, tanto en las plantas y vegetación que lo conforma, como en los animales que forman parte del ecosistema como tal.
Otro objetivo es aumentar la rentabilidad del tratamiento, esto se debe a que, si se aplica una dosis mayor del tratamiento fitosanitario o no se aplica en el momento indicado, la planta puede morir y eso aumentaría el coste.
Productos fitosanitarios más comunes
- Los herbicidas: generalmente se emplean para poder eliminar la denominada vegetación adventicia o las malas hierbas, ya que éstos compiten por los nutrientes y el agua de las plantas que se están cultivando en tu terreno.
- Los Insecticidas: son productos que se van a denominar ovicidas si están dirigidos a eliminar los huevos de los insectos, larvicidas si su objetivo son las larvas y adultecitas si su objetivo son los insectos en su etapa adulta. Se debe tener presente que van a atacar desde escarabajos, moscas hasta larvas.
- Las Acaricidas: se comercializan bajo la misma denominación de los insecticidas, pero están dirigidos a combatir en exclusividad a los ácaros; los más comunes que se consiguen en las plantaciones son el ácaro rojo y el ácaro eriófido.
¿Estás pensando en realizar un tratamiento fitosanitario? Cuidar de tus árboles y plantas depende de ti.
No esperes a que sea tarde. Actúa como medida de prevención y así evitarás que tus plantas y árboles se puedan ver afectadas por alguna placa o enfermedad.